27 de octubre de 2011

KFS

Era una niña estúpida, fea, antisocial, extraña. Tenía brackets, anteojos estúpidos, flequillo desprolijo y un intento de corte carré que me había arruinado la existencia.
Pero había cambiado.
Había madurado, me habían sacado los aparatos, me había teñido de rojo, me había crecido el pelo y mi flequillo estaba bien. Los lentes de contacto resaltaban mejor mis ojos, que cambiaba según la luz del cielo.  a
Hice más amigos, quienes aún creo que me quieren y quisieron por como era y soy.
¿Me siento mejor?
La verdad, me sentía mejor cuando era aquella niña.
Sigo siendo horrible, nunca tuve novio ni voy a tener. Ahora soy bisexual y dudo que alguna chica se pare a mirarme de forma diferente.
Si, ustedes dirán... ¿Que más queres hacerte? debes ser hermosa, debe haber alguna actitud tuya que hace que la gente se aleje.
Puede que tenga alguna actitud intolerable, no soy perfecta. Pero sin dudas, no es una actitud lo que aleja a la gente.
Soy yo, y mi maldita enfermedad.
Yo, y mi maldito Klippel Feil